miércoles, 18 de marzo de 2009

ehm ehm, tu sabes.

Se paró.
Se sentó.
Empezó a gritar.
Se resignó a escuchar.
No hacía mas que rimar con verbos conjugados.
Se sometía tan solo a escribir suspiros ahogados.

1 comentario:

Sandra Corral dijo...

Hablas de los reggetoneros yo lo sé!